¿Por qué un nuevo PGO?
Las Normas Subsidiarias de Planeamiento Municipal de Noreña, aprobadas definitivamente por acuerdo del Pleno de la Comisión de Urbanismo de Asturias (CUA) de fecha 25 de marzo de 1988, y publicadas en BOPA de 23 de julio de 1992 (NSPM1988/1992) han sido superadas y no se ajusta a la realidad socio-económica y legislativa.
Además el Reglamento de Ordenación del Territorio y Urbanismo del Principado de Asturias (ROTU), establece la obligación para todos los Planes en proceso de tramitación, cuyos Ayuntamientos no tengan las competencias delegadas, de adaptar su contenido al mismo cuando la aprobación provisional de estos se lleve a cabo con posterioridad a su entrada en vigor (prevista para el día 15 de Julio de 2008), de forma que la totalidad de los documentos que componen el PGO de Noreña están adaptados a su contenido, que ha servido como base jurídica junto con el TROTU para dotar de contenido a las presentes Normas Urbanísticas.
Razones de la revisión
Desde las Normas Subsidiarias, Noreña ha ido creciendo y transformándose como ciudad, surgiendo desde entonces una serie de cuestiones que no habían sido tratadas desde entonces.
Cambios socio-económicos
El Plan General de Ordenación es un documento que ha de redactarse en coherencia con las normas y los indicadores socioeconómicos actuales. Nos encontramos ante una evidente variación en los indicadores básicos de población, empleo y capacidad económica municipal cuya resolución requiere una alteración de las determinaciones del PGO.
Cambios Legislativos
Incorporando y adaptando el planeamiento de la ciudad a determinados cambios legislativos, sobre todo en aspectos medioambientales (Ley 21/2013, de 9 de diciembre, de evaluación ambiental), así como para el desarrollo sostenible, competitivo y eficiente del medio urbano (Ley 8/2013, de 26 de junio, de rehabilitación, regeneración y renovación urbanas.
Cambios Estratégicos
La necesidad de la actualización y adecuación de la Normativa urbanística con el fin de facilitar la implantación y el mantenimiento de las actividades comerciales e industriales. El proceso de revisión constituye el momento para “pensar” colectivamente la ciudad del futuro y plasmar el mayor consenso político y ciudadano sobre el “Modelo de Ciudad” para Noreña.
